Se implementó un curso teórico-práctico con jóvenes en situaciones de vulnerabilidad con una participación comprometida y estable. Los aprendizajes adquiridos fueron enfocados en mejorar su calidad de vida, como habilidades para el manejo de herramientas, autogestión, organización y trabajo en equipo. 

También, se asistió socialmente a un grupo para la adquisición de habilitación para manipulación de alimentos y para la apertura de una empresa Monotributo Social. Se trabajó en conjunto con la Gestión Ambiental de la Intendencia para crear un plan de gestión de residuos y para asegurar la accesibilidad universal con la creación de una rampa en el Ecoparador. Los jóvenes también fueron involucrados en la difusión del Ecoparador, mientras que se coordinó con otros actores para minimizar el impacto ambiental y utilizar este proyecto como un prototipo de futuros desarrollos similares. Al trabajar en el lugar, se estrecharon lazos con otros actores y vecinos de la zona.